EL DRAMA DE LAS MUJERES DE MEHUIN DESDE QUE CELCO INTENTA SACAR UN DUCTO AL MAR

“Defenderemos el mar que tranquilo te baña hasta la muerte”, dijo una de ellas. Conmovedores relatos de lo que han vivido en la última semana. Cuestionan el rol del gobierno, la Armada y Carabineros. Apelan directamente a la presidenta Bachelet.

Conmovedora es la situación que vive la comunidad de Mehuín. Así quedó patente en los relatos entregados por las mujeres de la localidad costera, que acompañaron este lunes a sus hombres a dar declaraciones a la Fiscalía de San José de la Mariquina, por el conflicto con el remolcador “Pangui” contratado por Celulosa Arauco y Constitución (Celco) para iniciar un estudio de impacto ambiental, iniciativa que se vio frustrada por la acción de los pescadores.

Las mujeres llegaron hasta San José con mariscos frescos y lienzos que desplegaron frente al Ministerio Público y luego iniciaron una marcha por la plaza de armas, hasta llegar a la oficina del alcalde Erwin Pacheco, donde le hicieron entrega simbólica de los alimentos sin contaminación.

NOCHES EN VELA

La señora Teresa Castro Garcés contó que en los últimos meses han visto mayor presencia de Carabineros en la comunidad, pero que la situación detonó la semana pasada, “el lunes en la noche, cuando hicieron ingreso las fuerzas especiales a Mehuín, empezó un caos de amedrentamiento directo”.

“Ese lunes, 20 para las 12 de la noche, hace ingreso Fuerzas Especiales de Carabineros, ordenados por el Ministerio del Interior. En no más de media hora se corta la energía eléctrica en toda la comunidad de Mehuín. Duró hasta el otro día después del medio día”, expresó.

La señora Berta Rodríguez, quien lleva 5 años viviendo en Mehuín y no tuvo la experiencia que marcó la vida comunitaria los años 96 y 97, cuando Celco tuvo su primer intento por sacar el ducto, agregó que “esa noche vimos muchos carabineros y a la una de la noche nos comenzamos a enterar de que estaba llegando un barco con intensión de hacer un estudio a la zona”.

La señora María Zúñiga Rumillanca relató que la gente no durmió esa noche tratando de explicarse lo que ocurría. “Cuando llegó la mañana, nos vimos rodeados de Carabineros por todos lados, Comisión Civil que nos estaban rodeando por la costa y nos fuimos todos ver qué pasaba en la caleta. Estaba todo lleno de carabineros. Nos sentimos muy mal y preocupados y asustados porque no sabíamos qué pasaba”.

Ella dice que Mehuín es un pueblo tranquilo y que jamás había visto algo así. “Nos empezamos a juntar todos y nos dimos cuenta que alguien nos había mandado a los carabineros, porque nunca vemos tantos uniformados. Lo normal son tres o cuatro y ahí habían como 50. Llegaron en micros y en vehículos. La sensación era de miedo”.

OLLA COMUN

Berta Rodríguez explicó que sintió pena al darse cuenta que “todos se coludieron para esto”.

“Estábamos indefensas. Nadie podía creer que se habían coludido los marinos y los carabineros. Eso me dio mucha pena. Ese día nos organizamos bien para hacer una olla común para los chicos que andaban en el mar”.

“En la tarde me dio más pena porque los chicos salieron del mar con un frío que no podían sostener una cuchara. De ahí en adelante, las mujeres de los pescadores estuvimos apoyando, dejando de lado los hijos y la casa, todo por apoyarlos a ellos”.

Su cuestionamiento es hacia el gobierno y a la empresa forestal, dado que en la zona viven más de 400 familias directamente de lo que entrega el mar.

“No sé que querrá la presidenta y las autoridades. Se les olvidó que el Estado, por ley, debe velar para que vivamos en un lugar limpio sin contaminación. Ellos deben defender a los habitantes. Esta empresa lo que quiere es tirarnos basura al mar”, argumentó.

“El gobernador marítimo dijo que no estaba a favor de ninguna de las dos partes y vimos como estaban defendiendo a esta empresa para hacer el estudio, porque de hecho le tiraron el barco (Pangui) encima a los pescadores. ¿Por qué hace eso?”, preguntó evidentemente emocionada.

“MORIREMOS DEFENDIENDO EL MAR”

La señora Lucía Ortega Oliva, quien tiene encima el conflicto del año 96, también quiso hablar.

“Estamos viviendo como señoras, como madres, como mujeres llenas de incertidumbre igual que el año 96 y 97. Hoy no podemos dormir tranquilas porque tenemos hijos y maridos que salen al mar para sustentar nuestro alimento”.

“Queremos que la presidenta nos escuche porque como sufrimos como ella. Lucharemos y apoyaremos a nuestros maridos hasta el final. Defenderemos nuestro mar, como dice la canción nacional: “Nuestro mar que tranquilo te baña” y creemos que moriremos defendiéndolo”.

“Los chilenos necesitamos tranquilidad y no queremos vivir como en la dictadura. Estamos en democracia. Los políticos nos han mentido. La señora presidenta da declaraciones a favor nuestro y al otro día es presionada y vuelve a dar en contra de nosotros y eso es injusto”.

“NO SOMOS DELINCUENTES”

Teresa Castro agregó que esa noche del lunes “la dictadura quedó chiquitita y por eso le quiero preguntar si su dictadura está comenzando, estamos en la mitad de esta famosa democracia que vivimos en Chile, o estamos en la parte final”.

“Como mujer me sentí muy amedrentada y con temor con lo que iba a suceder con nosotros. En Mehuín viven mujeres, niños pequeños y pescadores con sus familias”.

Teresa aseguró que al gobierno le costará borrar las horas de pánico que vivió la comunidad. “Recién al ver el alba sabíamos que Celulosa Arauco estaba haciendo ingreso a la bahía resguardado por la Armada”.

“Mi pregunta es: ¿Quién nos resguarda a los ciudadanos?. En vez de estar amedrentándonos a nosotros, que lleven a los carabineros a la ciudad, donde realmente hay delincuentes. Nosotros no somos delincuentes por estar defendiendo el patrimonio de todos los chilenos”, aseguró.

“MEHUIN ES UN PUEBLO SANO”

La señora Miriam Viviana Carrasco, contó que en Mehuín el sustento es aporte de los hombres y las mujeres aportan en la casa. Sin embargo, actualmente están sacando adelante un proyecto de cultivo de choros y ostras. “Con el ducto de Celco, las ganas de trabajar se nos van al suelo”.

Miriam agregó que Mehuín, durante el verano, es visitado por chilenos, peruanos y japoneses lo que significa ingresos para la gente. “El mar y el turismo son nuestras entradas”.

También cuestionó a la presidente Bachelet. “Cuando anduvo en Valdivia en su campaña, dijo que si el ducto de Celco contaminaba ella iba a apoyar de que no se fuera a Mehuín. Ojalá lo cumpliera”.

“Nosotros en Mehuín vamos a estar hasta el final, así como estuvimos hace 9 años atrás. Y vamos a seguir en la misma posición porque teníamos razón”.

“Me gustaría que el gobierno se ponga la mano en el corazón, porque la gente del mar no tiene otra entrada. De los hombres que hay en Mehuín, dos o tres sabrán tomar un martillo y trabajar”.

“Si el ducto se va a Mehuín, el mar muere y qué va a hacer la gente para comer. Va a tener que entrar a robar. Somos un pueblo sano”, dijo.

Publicada el miércoles, 02 de agosto de 2006.